¿Tienes la unción del Espíritu Santo?

La parábola de las 10 vírgenes de Mateo 25 señala hacia la culminación final de todas las cosas y tiene relación estrecha con la actividad del remanente. Es relevante y actual entender las profundas enseñanzas  que Jesús quería dejar a sus discípulos de todas las edades. Esta reflexión puede ayudarte a tener mejor espiritualidad y a prepararte para la vida eterna.

Esta parábola se ha cumplido y se cumplirá al pie de la letra así como el mensaje del tercer ángel, como el evangelio eterno, hasta el fin de los tiempos. De esta forma se convierte en un mensaje solemne para los cristianos del fin del tiempo del fin, lo cual quiere decir que es un mensaje actual y relevante. El aceite es una prueba suprema de entrega y pertenencia, de fidelidad y testimonio de pureza. Lección vital de consagración total para salvación.

En la parábola ambos grupos lo poseen todo, pero únicamente tener el aceite lo hace sabio “para la salvación que es en Cristo Jesús”. Tener al Espíritu Santo en todos los elementos de la vida real es lo que únicamente transformará el carácter, para salvación. “Toda la teoría es inútil, todo será en vano,  sin la realidad de su transformación”. De qué serviría tenerlo todo, o tener todo el conocimiento si al final descuido lo esencial? Es imprescindible e irremplazable la influencia transformadora del Espíritu Santo.

Si nos consagramos a su Espíritu como pabilos sedientos “no podremos evitar  que nuestras vidas brillen”, y así predicaremos con potencia (en alta voz)! Así como la tos, el hipo, el amor no se lo puede disimular, su influencia brotará no solo por nuestros poros, sino también a los gritos por nuestro carácter en servicio abnegado y constante.

 “Las vírgenes necias no eran hipócritas, …tenían una preocupación sincera por la verdad, se sentía atraídas por ella pero no se sintieron compelidas a conseguir el aceite esencial”  Que trágico! Necesitamos hoy compeler. Esto hace la diferencia para la salvación. Porque compeler es obligar, insistir con dedicación y persuasión… “fuérzalos a entrar” en la vida eterna. La perseverancia, la insistencia puede ser la diferencia en la salvación o la perdición de seres amados, o gente amada por Jesús. Que nadie arrebate tu corona, persevera hasta el fin.

El cielo es un lugar preparado para gente preparada, seamos sabios y aprovechemos las oportunidades, porque la verdadera sabiduría consiste en estar siempre listos. Nos hallamos cara a cara frente a la eternidad… pasas el tiempo, no postergues más, no sea que se apague tu fuego pronto y quedes perdido tan cerca del reencuentro con el Esposo, la segunda venida de Jesús.

 ¿Necesitas hoy la unción del Espíritu Santo?

¿Quieres disfrutar de sus beneficios eternos?

Por favor conságrate de corazón lo antes posible. y comparte tu experiencia con algún amigo.
Espero tus comentarios y participación.
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Pr. Edwin Villca.
(Esta es una reacción a la lectura del Libro: La venida del Consolador de Leroy Edwin Froom, cap 17.)